El conjunto Culé se impuso por 1-0 con gol de Dembélé; en el elenco Colchonero fue titular Molina y Correa ingresó desde el banco.
Barcelona le ganó por 1-0 al Atlético de Madrid, por la fecha 16 de La Liga en el Cívitas Metropolitano. Con este resultado, los de Xavi Hernández se suben a la cima en soledad con 41 puntos conseguidos, mientras que los de Diego Simeone caen a la quinta plaza de la tabla, con 27 unidades cosechadas y se encuentran en zona de Europa League.
Tras unos primeros instantes donde la paridad reinó, con el correr de los minutos el equipo blaugrana plantó bandera, comenzó a marcar el ritmo del partido y así se convirtió en el dueño de la pelota, pero sin poder traducirlo a ocasiones de gol.
Claro, hasta el minuto 21 de la primera mitad, cuando apareció Ousmane Dembélé. Luego de una jugada colectiva en la que Pedri decidió imprimirle velocidad y ser punzante para pisar el área rival, la número cinco quedó en los pies de Gavi, quien descargó para la aparición del atacante francés que no perdonó: remató de derecha, cruzado y puso arriba a los visitantes.
Con el marcador a su favor, el Culé bajó el ritmo, dejó de generar situaciones de peligro y el Colchonero pudo levantar cabeza, adelantarse unos metros en el campo, pero la diferencia mínima fue inamovible hasta el entretiempo. Ya en el complemento, y si bien el dominio de la herramienta siguió siendo de la visita, los del Cholo Simeone mostraron una mejor versión y fueron en busca del gol que les de la igualdad.
Dicho anhelado tanto no llegó gracias a una tremenda salvada sobre la línea del zaguero uruguayo Ronald Araújo. Ángel Correa desbordó por la derecha, envío un centro atrás para Antoine Griezmann, quien define de manera correcta para superar a Marc André Ter-Stegen, pero el defensor charrúa se interpuso antes de que la pelota cruce la línea de cal y logró despejar.
Así, los Blaugranas se llevaron los tres puntos del Metropolitano, se subieron en soledad a la cima y complicaron aún más el irregular andar de los de Simeone.