Santiago del Estero, Miércoles 24
Abril de 2024
X
Mundo

El Nobel de la Paz fue para Ales Bialiatski y dos organizaciones de Derechos Humanos

La organización rusa Memorial y al Centro para las Libertades Civiles de Ucrania fueron reconocidas por su labor, al igual que el activista bielorruso Ales Bialiatski.

07/10/2022

El premio Nobel de la Paz 2022 fue otorgado este viernes en Oslo al bielorruso Ales Bialiatski, a la organización de derechos humanos rusa Memorial y al Centro para las Libertades Civiles de Ucrania.

“El Comité Noruego del Nobel ha decidido conceder el #PremioNobelDeLaPaz 2022 al defensor de los derechos humanos bielorruso Ales Bialiatski, a la organización rusa de derechos humanos Memorial y a la organización ucraniana de derechos humanos Center for Civil Liberties”, publicó la cuenta oficial del premio Nobel de la Paz en Twitter.

“Los galardonados representan a la sociedad civil en sus países de origen. Llevan muchos años promoviendo el derecho a criticar al poder y a proteger los derechos fundamentales de los ciudadanos”, precisó la cuenta oficial.

Según el Comité Noruego del Nobel, Ales Bialiatski fue uno de los iniciadores del movimiento democrático que surgió en Bielorrusia a mediados de la década de 1980. “Ha dedicado su vida a promover la democracia y el desarrollo pacífico en su país natal”, afirmó.

Fundó la organización Viasna Human Rights Centre en 1996, que se convirtió en una amplia organización de derechos humanos que documentaba y protestaba contra el uso de la tortura contra los presos políticos por parte de las autoridades.

“Las autoridades gubernamentales han intentado en repetidas ocasiones silenciar a Ales Bialiatski. Desde 2020, sigue detenido sin juicio. A pesar de las tremendas dificultades personales, el Sr. Bialiatski no ha cedido ni un ápice en su lucha por los derechos humanos y la democracia en Bielorrusia”, indicó la cuenta oficial del premio Nobel de la Paz.

Por su parte, Memorial, la ONG rusa galardonada, fue creada en 1987 por activistas de derechos humanos de la antigua Unión Soviética que “querían asegurarse de que las víctimas de la opresión del régimen comunista nunca fueran olvidadas”.