Tiene 39 años y amenaza constantemente en atentar contra la paz de Asia y el mundo, jactándose del poder nuclear de Corea del Norte. Como si esto fuera poco, prohíbe todo lo que provenga del capitalismo, y hasta no permite perros como mascotas.
El 18 de julio de 2012 fue nombrado mariscal del Ejército Popular del país: máximo rango, que lo habilitó a reafirmar su control absoluto sobre las Fuerzas Armadas norcoreanas. Ese día recibió la última “estrella” que le faltaba para ser el “dueño” de Corea del Norte.. Cumple 10 años como líder supremo Kim Jong-un, el dictador que amenaza la paz en Asia y el mundo.
Kim asumió de manera oficial la Comandancia Suprema del Ejército Popular de Corea del Norte luego del funeral estatal de su padre, Kim Jong-Il, el 28 de diciembre de 2011. En ese entonces, le faltaban diez días para cumplir 29 años. Los títulos que ostenta son los de secretario general del Partido del Trabajo de Corea, presidente de la Comisión Militar Central, presidente de la Comisión de Defensa Nacional, comandante supremo del Ejército del Pueblo Coreano y miembro del Presidium del Comité Permanente del Politburó del Partido del Trabajo de Corea.
Hoy, a los 39 años, este político y militar, que fue educado en Berna, Suiza, que habla inglés y alemán a la perfección, siembra el miedo en su país y, sobre todo, más allá de sus fronteras. “Vamos a continuar dando pasos para fortalecer y desarrollar nuestras capacidades nucleares a un ritmo más rápido. En anticipo de la turbulenta situación política y militar y todo tipo de crisis futura aumentaremos nuestra fuerza nuclear a la mayor velocidad posible”, dijo el líder norcoreano en una de sus últimas apariciones públicas.
Según Kim, el papel principal del armamento nuclear de Corea del Norte es el de disuasión, pero esta función puede cambiar si los intereses fundamentales del país son atacados. “Si cualquier fuerza intenta usurpar los intereses fundamentales de nuestro país, nuestra fuerza nuclear no tendrá otra elección que llevar a cabo su segunda misión”, aseguró.
Las principales amenazas son hacia Corea del Sur pero su enfrentamiento más fuerte es con Estados Unidos, país que siempre cuestiona la capacidad del armamento nuclear de las fuerzas de Kim. El peligro del “botón rojo” que desataría una Tercera Guerra Mundial está latente en cada paso del dictador norcoreano.
Kim Jong-un y la falta de libertades individuales
Al halo de misterio que rodea su figura, de la que poco se sabe o, mejor dicho, poco se difunde, hay que sumarle las polémicas decisiones que toma con su pueblo. A la falta de libertades individuales básicas, se suman algunas medias que rozan lo insólito.
Por ejemplo, Corea del Norte estableció en el último tiempo una ley que ordena castigar severamente a aquellas personas que sean sorprendidas viendo series o películas extranjeras, así como a aquellas que utilicen ropa o incluso jerga de otros países.
Con esta norma, Kim Jong-Un se propone luchar contra lo que su régimen llama “pensamiento reaccionario”. La norma dice “que si un trabajador es descubierto (consumiendo este tipo de productos extranjeros), el jefe de la fábrica puede ser castigado, y si un niño es problemático, los padres también pueden ser castigados”.
Según los medios internacionales, la persecución no se centra exclusivamente en los productos audiovisuales. Recientemente, Kim Jong-Un escribió una carta en medios estatales pidiendo a la Liga Juvenil del país que tome medidas enérgicas contra el “comportamiento desagradable, individualista y antisocialista” entre los jóvenes. Su intención, con esa misiva, sería acabar con el habla extranjera, los peinados y la ropa que él describe como “venenos peligrosos”.
Además, el régimen de Kim Jong-un prohibió la tenencia de perros como mascotas por considerarlo “un lujo burgués” y ordenó la confiscación de los caninos de Pyongyang, la ciudad capital del país. Sin embargo, los dueños temen que sus mascotas sean utilizadas para resolver la escasez de alimentos que afecta a gran parte de la población.
Los perros confiscados son enviados a zoológicos públicos para que se reproduzcan o vendidos a restaurantes que ofrecen carne de perro. Cabe recordar que la carne de perro se ha considerado durante mucho tiempo un manjar en la península de Corea, aunque la tradición de comer perros se está desvaneciendo en Corea del Sur.
Kim Jong-un y el apoyo total a Rusia
Y por si fueran pocas las exhibiciones de los misiles balísticos en cada desfile militar o en cada ensayo nuclear, el dictador expresó su “pleno apoyo” al presidente de Rusia, Vladimir Putin, quien invadió a Ucrania, desatando una guerra desde el 24 de febrero.
“El pueblo ruso ha logrado grandes éxitos en el logro de la justa causa de defender la dignidad y la seguridad de su país, así como su derecho al desarrollo, mientras enfrenta todo tipo de desafíos y dificultades bajo la dirección del presidente”, expresó el norcoreano días después del comienzo del actual conflicto armado.