Susana grabó numerosas películas, participó en diferentes obras teatrales y cautivó durante años a la audiencia con su programa “Hola Susana”.
María Susana Giménez Aubert nació el 29 de enero de 1944 en Buenos Aires. Considerada una de las figuras en la historia de la televisión argentina, Susana grabó numerosas películas, participó en diferentes obras teatrales y cautivó durante años a la audiencia con su programa “Hola Susana”.
A lo largo de su carrera recibió múltiples distinciones y galardones. Entre los más importantes pueden mencionarse el Martín Fierro de Oro, en 1996, y el Martín Fierro de Platino, en el 2010.
Su familia
Mercedes Sarrabayrouse es la única hija de la diva. Mercedes nació el 20 de octubre de 1962 y le dio dos nietos a Susana: Lucía y Manuel.
La diva del teléfono, como también se la conoce por los concursos que realizó durante años en su programa, tuvo varias relaciones amorosas con famosos argentinos. La relación con el boxeador Carlos Monzón, con quien convivió, es una de las más recordadas. También compartió su amor con Ricardo Darín, Cacho Castaña, Carlos Calvo y Sergio Denis.
En el año 1988, Susana dio el “sí, quiero” con Huberto Roviralta, con quien tuvo un millonario divorcio en 1998. La separación de Susana Giménez con Roviralta tuvo una gran repercusión pública por el escándalo que protagonizaron. Hablar de Roviralta es recordar el llamado "cenicerazo". Sí, Susana terminó por revolearle un cenicero que fue a parar al tabique del ex polista, quien salió de la vivienda para mostrarse ensangrentado ante las cámaras de los medios que habían llegado a la lujosa mansión que compartía con Susana. Sí, ese hecho es uno de los escándalos más recordados de la farándula argentina.
Susana es también conocida por sus bloopers y declaraciones siempre polémicas. Entre los errores más recordados está el del “dinosaurio vivo”. En 1993, en su living, la conductora hablaba con una mujer que le contó que habían “traído un dinosaurio de la Patagonia". "¿En serio? ¿vivo?", interrogó la rubia y desconcertó a su invitada, quien le contestó. “Esperemos que no”. Lógicamente, el descuido de Susana hizo reír a todo el mundo. Fue en el año 1993, pero aún hoy, se habla de ese blooper.
Uno de los escándalos más recientes lo protagonizó cuando en plena pandemia por el coronavirus, abandonó Argentina y viajó a su casa rural en Rincón del Indio, en las afueras de Punta del Este, Uruguay.
La actitud de Susana dividió a los argentinos, pues muchos la defendían y otros la criticaban por la facilidad con la cual viajó a Uruguay, en un momento de aislamiento que tiene encerrado a más de medio país.